En Europa, donde los trenes son famosos por llegar a tiempo y ser confortables, la decisión de viajar por tren o en avión puede ser difícil. Los viajeros en los Estados Unidos, sin embargo, no han tenido que preocuparse mucho por esta decisión debido a la calidad históricamente inferior del viaje por tren en ese país.
No obstante, en los últimos años, algunos en los EE.UU. han examinado más de cerca la cuestión de si viajar por tren puede tener más sentido que volar, bajo ciertas circunstancias. Muchos han concluido que bajo las condiciones correctas puede ser mejor tomar un tren que un avión. Si te estás preguntando qué método para viajar te conviene más, considera las siguientes preguntas:
* ¿Cuánto cuesta el pasaje? En ocasiones, viajar por tren puede ahorrarte cientos de dólares con respecto a un vuelo comercial, particularmente en rutas atestadas o en el último minuto. Un vuelo entre Boston y Nueva York reservado con 24 horas de anticipación puede costarte casi 700 dólares. Reservar la misma ruta en Amtrak con 24 horas de anticipación te costará menos de 250 dólares.
* Cuánto tiempo toma el llegar. En rutas cortas, viajar por tren te toma menos tiempo que tomar un avión, particularmente cuando tomas en cuenta molestias como conducir al aeropuerto, documentar tu equipaje y pasar los filtros de seguridad. En rutas más largas, sin embargo, el volar puede ahorrarte varias horas.
* Adónde te diriges. Con frecuencia, los trenes te dejan directamente en el centro de una ciudad, mientras que los aviones suelen dirigirse a aeropuertos a las afueras de las poblaciones. Por tanto, si te interesa ver la ciudad por sí misma, el tren te llevará adonde quieres estar, pero si a fin de cuentas viajas a un lugar fuera de la ciudad, esto podría no ofrecer ventaja alguna.
* ¿Qué llevas contigo? En términos generales, las restricciones al equipaje son mucho menos prohibitivas cuando viajas por tren. Así que si estás planeando viajar con mucho equipaje, sin duda querrás dar un segundo vistazo a la idea de viajar en ferrocarril.
